Todo comenzó con una herida en el tobillo que parecía algo menor, pero debido a mi diabetes, la infección avanzó sin que nos diéramos cuenta. Después sufrí un esguince y una fuerte gripa, lo que complicó aún más la situación. La inflamación del tobillo hizo que la herida se abriera y comenzara a supurar.

Acudí al IMSS y a la Cruz Roja, donde me dieron medicamentos, pero la infección no cedió. De un día para otro, la piel alrededor de mi tobillo comenzó a oscurecerse, lo que nos alarmó y nos llevó a buscar atención con un especialista. Tras realizarme radiografías, determinaron que necesitaba hospitalización urgente, por lo que fui ingresado al Hospital General de Valle de Bravo el 2 de marzo.

Desde entonces, he pasado por dos lavados quirúrgicos y actualmente sigo usando un tratamiento VAC para ayudar a la recuperación de la herida. Aún me quedan al menos dos cirugías más y un proceso largo de recuperación.

A pesar de estar en un hospital público, hemos tenido que cubrir gastos significativos, incluyendo medicamentos, insumos médicos y el tratamiento VAC, lo que ha generado una carga financiera difícil de afrontar.

Cualquier ayuda, por pequeña que sea, me acercará un paso más a mi recuperación. Si no puedes donar, compartir esta campaña también me ayudará muchísimo. ¡Gracias por tu apoyo!