Help Imer Mata Vargas lay to rest ️
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As many were counting the minutes for new year’s countdown, our family was shedding tears trying to grasp every second we had left with you. Imer Mata Vargas, a son, brother, uncle, cousin, nephew was fighting against melanoma, one of the most serious forms of cancer. He had been diagnosed with cancer early September. Imer had undergone surgery to remove any signs of cancer in October and his surgery was a success. We had thanked God for a successful surgery and prayed for a speedy recovery. However, our happiness was short lived. In early December Imer started feeling ill and was rushed to the hospital. As we prayed for a miracle, our family recieved the devastating news that his cancer had metastasized all throughout his brain. Days turned into minutes, then into seconds, and we found ourselves in the hospital again. The cancer had invaded Imers brain. As we were trying to process that the cancer had returned, we never thought we would have to prepare to say goodbye.
For those who had the luxury of meeting Imer, even for a few seconds, they knew how loving and selfless he was. In fact, selfless may be an understatement, Imer made sure that our family was okay and downplayed the severity of it all. He would say, “whatever Gods will is I accept ” and “Don’t cry, im okay, enjoy me while im here”! He was a warrior and fought a great battle. Imer insured that he accepted God in his life, and always thank God for another day. He trusted God’s timing and placed his entire faith in him. Imer never questioned why him or never complained. He was grateful with God for the life he had granted him and all his blessings. He ensured to share his testimony and God’s gospel with those around him.
Imer was the comedian of the family, always had a big smile and such a contagious laugh! Even in the midst of his battle, he never stopped smiling or cracking jokes. Imer was the person you wanted to go to if you wanted a slap of reality! He never sugarcoated anything, always had a stubborn personality and there was no way of proving him wrong! He knew the definition and reason for everything, even if he had no idea what it was. Imer always wanted to have his family united and close, even if it was for a last minute carne asada. He was the grill king and no one touched the meat besides him in every cookout. He loved old school rap, hip hop, corridos, regional mexican music, etc. Not to mention, Imer loved his Raiders and Angels team! Best believe he was always representing either or.
We not only thank God for having placed Imer in our lives, we thank Imer for being who he was. We thank him for all the laughs and memories. Our beloved Imer touched many hearts and deserves a proper burial.
We thank everyone for sharing and donating. Any amount is greatly appreciated! Thank you for helping our family during this hard time.
Mientras muchos contaban los minutos para recibir el año nuevo, nuestra familia derramaba lágrimas tratando de aprovechar cada segundo que nos quedaba contigo. Imer Mata Vargas, hijo, hermano, tío, primo, sobrino luchaba contra el melanoma, una de las formas más agresivas de cáncer. A principios de septiembre le habían diagnosticado cáncer. Imer se había sometido a una cirugía para eliminar cualquier signo de cáncer en octubre y su cirugía fue un éxito. Le dimos gracias a Dios por una cirugía exitosa y orabamos por una pronta recuperación. Sin embargo, nuestra felicidad duró poco. A principios de diciembre, Imer empezó a sentirse mal y lo llevamos de urgencia al hospital. Mientras orábamos por un milagro, nuestra familia recibió la devastadora noticia de que su cáncer había metástizado por todo su cerebro. Los días se convirtieron en minutos, luego en segundos y nos encontrabamos nuevamente en el hospital. El cáncer había invadido el cerebro de Imer. Mientras intentábamos procesar que el cáncer había regresado, nunca pensamos que tendríamos que prepararnos para decir adiós.
Aquellos que tuvieron el lujo de conocer a Imer, aunque fuera por unos segundos, sabían lo cariñoso y altruista que era. De hecho, altruista puede ser un eufemismo, Imer se aseguró de que nuestra familia estuviera bien y minimizó la gravedad de todo. Él decía: "Ahh, si alguien pregunta, diles que estoy bien" y "No llores, estoy bien, disfrútame mientras me tienes". Era un guerrero y peleó una gran batalla. Imer se aseguró de aceptar a Dios en su vida y siempre le agradeció a Dios por otro día más. Confió en el tiempo de Dios y puso toda su fe en él. Imer nunca cuestionó por qué el y nunca se quejó. Estaba agradecido con Dios por la vida que le había concedido y todas sus bendiciones. Se aseguró de compartir su testimonio y el evangelio de Dios con quienes lo rodeaban.
Imer era el comediante de la familia, siempre tenía una gran sonrisa y una risa tan contagiosa! Incluso en medio de su batalla, nunca dejó de sonreír o hacer bromas. ¡Imer era la persona a la que querías acudir si querías una dosis de realidad! Nunca endulzó nada, siempre tuvo una personalidad necia y no había forma de demostrar que estaba equivocado. Conocía la definición y el motivo de todo, aunque no tuviera idea de qué se trataba. Imer siempre quiso tener a su familia unida y cerca, aunque fuera para una carne asada de última hora. Él era el rey de la parrilla y nadie tocaba la carne excepto él. Le encantaba old school rap, el hip hop, los corridos, la música regional mexicana, etc. ¡Sin mencionar que a Imer le encantaba su equipo los Raiders y Angels! Y sin duda siempre represento sus equipos en sus camisas y cachuchas.
No sólo agradecemos a Dios por haber puesto a Imer en nuestras vidas, le agradecemos a Imer por ser quien era. Le agradecemos a el por todas las risas y recuerdos. Nuestro querido Imer tocó muchos corazones y merece un entierro digno.
Agradecemos a todos por compartir y donar. ¡Cualquier cantidad es muy apreciada! Gracias por ayudar a nuestra familia durante este momento difícil.
For those who had the luxury of meeting Imer, even for a few seconds, they knew how loving and selfless he was. In fact, selfless may be an understatement, Imer made sure that our family was okay and downplayed the severity of it all. He would say, “whatever Gods will is I accept ” and “Don’t cry, im okay, enjoy me while im here”! He was a warrior and fought a great battle. Imer insured that he accepted God in his life, and always thank God for another day. He trusted God’s timing and placed his entire faith in him. Imer never questioned why him or never complained. He was grateful with God for the life he had granted him and all his blessings. He ensured to share his testimony and God’s gospel with those around him.
Imer was the comedian of the family, always had a big smile and such a contagious laugh! Even in the midst of his battle, he never stopped smiling or cracking jokes. Imer was the person you wanted to go to if you wanted a slap of reality! He never sugarcoated anything, always had a stubborn personality and there was no way of proving him wrong! He knew the definition and reason for everything, even if he had no idea what it was. Imer always wanted to have his family united and close, even if it was for a last minute carne asada. He was the grill king and no one touched the meat besides him in every cookout. He loved old school rap, hip hop, corridos, regional mexican music, etc. Not to mention, Imer loved his Raiders and Angels team! Best believe he was always representing either or.
We not only thank God for having placed Imer in our lives, we thank Imer for being who he was. We thank him for all the laughs and memories. Our beloved Imer touched many hearts and deserves a proper burial.
We thank everyone for sharing and donating. Any amount is greatly appreciated! Thank you for helping our family during this hard time.
Mientras muchos contaban los minutos para recibir el año nuevo, nuestra familia derramaba lágrimas tratando de aprovechar cada segundo que nos quedaba contigo. Imer Mata Vargas, hijo, hermano, tío, primo, sobrino luchaba contra el melanoma, una de las formas más agresivas de cáncer. A principios de septiembre le habían diagnosticado cáncer. Imer se había sometido a una cirugía para eliminar cualquier signo de cáncer en octubre y su cirugía fue un éxito. Le dimos gracias a Dios por una cirugía exitosa y orabamos por una pronta recuperación. Sin embargo, nuestra felicidad duró poco. A principios de diciembre, Imer empezó a sentirse mal y lo llevamos de urgencia al hospital. Mientras orábamos por un milagro, nuestra familia recibió la devastadora noticia de que su cáncer había metástizado por todo su cerebro. Los días se convirtieron en minutos, luego en segundos y nos encontrabamos nuevamente en el hospital. El cáncer había invadido el cerebro de Imer. Mientras intentábamos procesar que el cáncer había regresado, nunca pensamos que tendríamos que prepararnos para decir adiós.
Aquellos que tuvieron el lujo de conocer a Imer, aunque fuera por unos segundos, sabían lo cariñoso y altruista que era. De hecho, altruista puede ser un eufemismo, Imer se aseguró de que nuestra familia estuviera bien y minimizó la gravedad de todo. Él decía: "Ahh, si alguien pregunta, diles que estoy bien" y "No llores, estoy bien, disfrútame mientras me tienes". Era un guerrero y peleó una gran batalla. Imer se aseguró de aceptar a Dios en su vida y siempre le agradeció a Dios por otro día más. Confió en el tiempo de Dios y puso toda su fe en él. Imer nunca cuestionó por qué el y nunca se quejó. Estaba agradecido con Dios por la vida que le había concedido y todas sus bendiciones. Se aseguró de compartir su testimonio y el evangelio de Dios con quienes lo rodeaban.
Imer era el comediante de la familia, siempre tenía una gran sonrisa y una risa tan contagiosa! Incluso en medio de su batalla, nunca dejó de sonreír o hacer bromas. ¡Imer era la persona a la que querías acudir si querías una dosis de realidad! Nunca endulzó nada, siempre tuvo una personalidad necia y no había forma de demostrar que estaba equivocado. Conocía la definición y el motivo de todo, aunque no tuviera idea de qué se trataba. Imer siempre quiso tener a su familia unida y cerca, aunque fuera para una carne asada de última hora. Él era el rey de la parrilla y nadie tocaba la carne excepto él. Le encantaba old school rap, el hip hop, los corridos, la música regional mexicana, etc. ¡Sin mencionar que a Imer le encantaba su equipo los Raiders y Angels! Y sin duda siempre represento sus equipos en sus camisas y cachuchas.
No sólo agradecemos a Dios por haber puesto a Imer en nuestras vidas, le agradecemos a Imer por ser quien era. Le agradecemos a el por todas las risas y recuerdos. Nuestro querido Imer tocó muchos corazones y merece un entierro digno.
Agradecemos a todos por compartir y donar. ¡Cualquier cantidad es muy apreciada! Gracias por ayudar a nuestra familia durante este momento difícil.
Organizer
Magaly Mata
Organizer
Riverside, CA