Saving Omi Monica
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During the early morning of Mother's day (May 10, 2020) and a day before her 84th birthday, my beautiful grandma (Omi aka Monica Klein) suffered from a terrible stroke that put her life on the line, balancing between life and death. My mother found her on the floor of her room and rushed my father to call an ambulance....
Nobody picked up when he called 911....but luckily an ambulance from Hatzalah came to the rescue right after we called.
Rushing her to the nearest hospital --- one which wasn't turned into an all-COVID hospital -- her life was now in the hands of a doctor/angel who opened her brain to release the blood, and who removed a piece of her skull due to the severity of the internal bleeding in her head, specifically the top left area of her brain. The surgery lasted more than 3 hours -- but it felt like years. And when she came out to intensive care her life was still on the line, her body connected to machines and respirators.
After a few days of being in an induced coma, the doctors lowered the sedatives to give her a chance to wake up. It's been 6 days and her recovery have been slowly progressing. She is still in intensive care and even though she has been moving mostly her left side and has acknowledged our presence through smooth movements, she is still connected to a respirator because she hasn't been able to wake up --even though she is fully capable of breathing on her own now.
My grandma, Monica, is a unique woman. Mother of 2, grandma of 4 and friend of hundreds, her love for life is bigger than anything. At times shy, and at times bold, her presence is like a sun which makes everyone fall in love with her light. The truth is this woman has been my best friend, my muse, my confidant, and my travel buddy in the past years. And I know I am not the only one who feels that way because this is the case for my whole family. She is forever curious to learn and even when she lost her home during the earthquake in Mexico in 2017, her spirit was stronger than the harsh reality she encountered. Instead of giving up, she moved to her daughter's house (my mom's) and started going to film criticism classes with her. She enrolled in the university for seniors and on top of her other classes, she also started writing her memoirs. She even posed for me (I am a photographer) and became one of the beautiful senior models in the cover of Vogue Mexico for May-June currently out in the world --which I actually made in her honor.
Omi has always been passionate about art, culture, and history and gave tours to German groups all over Mexico to share her love with the country she adopted as hers until she retired 5 months ago.
One thing I can say for sure is she has been going through some of the best years of her life, her golden age. Just to mention a few things; road-tripping national parks in the USA, going to Israel (her dream) and floating in the dead sea (she even bought a batting suit for that), going to Hollywood, dancing in videos, being a magazine cover star, watching movies with her daughter everyday, gossiping for at least an hour everyday with her son and then another 5 with her many friends, seeing exhibitions, going to plays (she went more than 10 times to see her grandson on stage), concerts, dinner parties, and friends.
The truth is anyone who knows my Grandma would know she is the kind of organized independent person who would never live without health insurance. But a few years ago she managed to join the system of one of the best public hospitals in the country, Nutricion (trust me when I say making it into their system is like winning the lottery, not everyone gets it) and due to the fact that she was protected under the arm of this amazing institution, she stopped paying for her insurance, confident that she would be able to attend there in case of an emergency. Long story short and to not keep you here longer, the COVID19 pandemic started, and the magnificent institution that would protect my grandma in times of crisis suddenly turned into an ALL COVID HOSPITAL and declared they would not attend any other health crisis.
So that brings us to now.
How are we going to use the money? To pay for the surgery and the intensive care (at least 12 days of it) and if possible even a few extra days in a normal care room and rehabilitation. From just the first 2 days of hospitalization in the private hospital, the medical bill was already a staggering $25,000 USD. Every day in intensive care is about $2,500 USD, at least until we manage to get her off of the respirator. Unfortunately, our family doesn't have the means to fund this critical endeavor. We know we are still in the beginning stages of this situation, but we also know how hard she is fighting for her life. And this is why we truly need your help. Any contribution, big or small, is going to mean the world to us. We know these are very harsh times for everyone, but even if all you can do is share our story with your friends we would deeply appreciate it. Please help us give this incredible woman a second chance so she can continue enjoying life as much as she did.
Our sincere gratitude,
Tania Franco Klein, Diego Franco Klein, Kevin Klein, Karel Klein - grandchildren
Martin Klein, Ivonne Klein - son and daughter
EL MONTO FINAL ESTA EN DOLARES, Y TAMBIEN LAS DONACIONES
ESPAÑOL:
Durante las primeras horas del día de las madres (10 de mayo 2020) y un día antes de cumplir 84 años, mi adorada abuela”La Omi”, como le decimos , sufrió de un terrible derrame cerebral que la dejó batallando entre la vida y la muerte. Al percatarse de que no salía de su cuarto en la mañana, mi mamá entró para encontrarla en el piso sin conocimiento. Con urgencia le pidió a mi papá que se comunicara con el 911 para pedir una ambulancia, pero no contestaron en la línea. Para su suerte el servicio Hatzalah le envió una ambulancia que rápidamente vino al rescate.
Apresurándola al hospital más cercano, que no fuera COVID. Su vida ahora estaba en manos de un neurocirujano/ángel que le hizo una cirugía en el cerebro y quien le removió un pedazo de cráneo debido a la severidad del sangrado interno en su cabeza, (específicamente el área superior izquierda de su cerebro). La cirugía duró un poco más de 3 horas, aunque se sintió como una eternidad. Cuando salió del quirófano y fue trasladada a terapia intensiva su vida todavía estaba en peligro, su cuerpo estaba conectado a máquinas y a un respirador. Después de unos días de estar completamente sedada, los médicos bajaron la dosis para darle la oportunidad de despertar. Han pasado 6 días y su recuperación ha progresado lentamente, todavía está en terapia intensiva, y aunque, se ha estado moviendo (principalmente su lado izquierdo) y ha reconocido nuestra presencia a través de movimientos suaves, todavía está conectada al respirador porque no ha podido despertarse.
Mi abuela, Mónica, es una mujer única. Madre de 2, abuela de 4 y amiga de cientos, su amor por la vida es más grande que cualquier otra cosa. A veces tímida y audaz su presencia es como un sol que hace que todos se enamoren de su luz. La verdad es que esta mujer ha sido mi mejor amiga, mi musa, mi confidente y mi compañera de viaje y vida en los últimos años. Y sé que no soy la única que se siente así ya que es el caso de toda la familia.
Le caracteriza una infinita curiosidad por aprender. Incluso cuando perdió su hogar durante el terremoto en México en 2017 y se convirtió en damnificada, su espíritu amoroso fue más fuerte que la dura realidad en la que se encontraba. En lugar de darse por vencida, se mudó a la casa de su hija (mi madre) y comenzó a ir a clases de crítica de cine con ella, se inscribió en la universidad para personas mayores y, entre otras clases, comenzó a escribir sus memorias. Incluso posó para mí (que soy fotógrafa) y se convirtió en una de las hermosas modelos mayores que protagonizaron la portada de Vogue México para Mayo-Junio.
Omi siempre ha sido una apasionada del arte, la cultura y la historia. Incluso dedicó su carrera a dar tours a grupos alemanes en todo México para compartir su amor con el país que adoptó como suyo, hasta que se retiró hace 5 meses.
Una cosa que puedo decir con certeza es que ha pasado por algunos de los mejores años de su vida, su edad de oro. Solo por mencionar algunas cosas; road-trips en parques nacionales en Estados Unidos,visitar Israel (su sueño) y flotar en el mar muerto (incluso compró un traje de baño para eso), ir a Hollywood, bailar en videos, ser la estrella de una portada, ver películas con su hija todos los días, chismear durante al menos una hora todos los días con su hijo y también otras 5 horas con sus amigas, ir a exposiciones, a obras de teatro (fue más de 10 veces a ver a su nieto en el escenario), conciertos, cenas, amigos.
Cualquier persona que conozca a mi abuela sabría que es el tipo de persona independiente y organizada que nunca viviría sin tener un seguro médico. Pero hace unos años se las arregló para unirse al sistema de uno de los mejores hospitales públicos del país; Nutrición (créeme cuando te digo que pertenecer a su sistema es como ganarse la lotería) y debido a que se sintió protegida bajo el brazo de esta increíble institución, dejó de pagar su seguro, confiando en que podría asistir allí en caso de emergencia. Poco contaba con que comenzaría la pandemia de COVID19, y la magnífica institución que la protegería en tiempos de crisis de repente se convertiría en un HOSPITAL EXCLUSIVAMENTE COVID y la cual no asistiría ningún otro tipo de crisis.
Lo que nos lleva al día de hoy: sólo en los primeros 2 días de estar internada en el hospital privado, la factura médica ya era de $575,000 . Pesos mexicanos. Todos los días en terapia intensiva cuestan al rededor de $50,000 pesos mexicanos, al menos hasta que logremos sacarla del respirador. Desafortunadamente, nuestra familia no tiene los medios para continuar haciendo este esfuerzo importante y sabemos que todavía estamos en las etapas iniciales de esta situación, pero también sabemos lo mucho que está luchando ella por su vida.
Y es por eso que realmente necesitamos tu ayuda. Cualquier contribución, grande o pequeña, significará mucho para nosotros y con ello podremos cubrir los gastos de la cirugía, dos semanas en terapia intensiva y quizá un poco de rehabilitación. Sabemos que este es un momento muy duro para todos, pero incluso si puedes compartir nuestra historia con tus amigos, lo apreciaríamos profundamente.
Por favor ayúdanos a darle a Omi una segunda oportunidad de seguir disfrutando la vida.
**Disclosure: The image of this campaign was inspired in Barbara Kruger artwork. We hope she can understand.
During the early morning of Mother's day (May 10, 2020) and a day before her 84th birthday, my beautiful grandma (Omi aka Monica Klein) suffered from a terrible stroke that put her life on the line, balancing between life and death. My mother found her on the floor of her room and rushed my father to call an ambulance....
Nobody picked up when he called 911....but luckily an ambulance from Hatzalah came to the rescue right after we called.
Rushing her to the nearest hospital --- one which wasn't turned into an all-COVID hospital -- her life was now in the hands of a doctor/angel who opened her brain to release the blood, and who removed a piece of her skull due to the severity of the internal bleeding in her head, specifically the top left area of her brain. The surgery lasted more than 3 hours -- but it felt like years. And when she came out to intensive care her life was still on the line, her body connected to machines and respirators.
After a few days of being in an induced coma, the doctors lowered the sedatives to give her a chance to wake up. It's been 6 days and her recovery have been slowly progressing. She is still in intensive care and even though she has been moving mostly her left side and has acknowledged our presence through smooth movements, she is still connected to a respirator because she hasn't been able to wake up --even though she is fully capable of breathing on her own now.
My grandma, Monica, is a unique woman. Mother of 2, grandma of 4 and friend of hundreds, her love for life is bigger than anything. At times shy, and at times bold, her presence is like a sun which makes everyone fall in love with her light. The truth is this woman has been my best friend, my muse, my confidant, and my travel buddy in the past years. And I know I am not the only one who feels that way because this is the case for my whole family. She is forever curious to learn and even when she lost her home during the earthquake in Mexico in 2017, her spirit was stronger than the harsh reality she encountered. Instead of giving up, she moved to her daughter's house (my mom's) and started going to film criticism classes with her. She enrolled in the university for seniors and on top of her other classes, she also started writing her memoirs. She even posed for me (I am a photographer) and became one of the beautiful senior models in the cover of Vogue Mexico for May-June currently out in the world --which I actually made in her honor.
Omi has always been passionate about art, culture, and history and gave tours to German groups all over Mexico to share her love with the country she adopted as hers until she retired 5 months ago.
One thing I can say for sure is she has been going through some of the best years of her life, her golden age. Just to mention a few things; road-tripping national parks in the USA, going to Israel (her dream) and floating in the dead sea (she even bought a batting suit for that), going to Hollywood, dancing in videos, being a magazine cover star, watching movies with her daughter everyday, gossiping for at least an hour everyday with her son and then another 5 with her many friends, seeing exhibitions, going to plays (she went more than 10 times to see her grandson on stage), concerts, dinner parties, and friends.
The truth is anyone who knows my Grandma would know she is the kind of organized independent person who would never live without health insurance. But a few years ago she managed to join the system of one of the best public hospitals in the country, Nutricion (trust me when I say making it into their system is like winning the lottery, not everyone gets it) and due to the fact that she was protected under the arm of this amazing institution, she stopped paying for her insurance, confident that she would be able to attend there in case of an emergency. Long story short and to not keep you here longer, the COVID19 pandemic started, and the magnificent institution that would protect my grandma in times of crisis suddenly turned into an ALL COVID HOSPITAL and declared they would not attend any other health crisis.
So that brings us to now.
How are we going to use the money? To pay for the surgery and the intensive care (at least 12 days of it) and if possible even a few extra days in a normal care room and rehabilitation. From just the first 2 days of hospitalization in the private hospital, the medical bill was already a staggering $25,000 USD. Every day in intensive care is about $2,500 USD, at least until we manage to get her off of the respirator. Unfortunately, our family doesn't have the means to fund this critical endeavor. We know we are still in the beginning stages of this situation, but we also know how hard she is fighting for her life. And this is why we truly need your help. Any contribution, big or small, is going to mean the world to us. We know these are very harsh times for everyone, but even if all you can do is share our story with your friends we would deeply appreciate it. Please help us give this incredible woman a second chance so she can continue enjoying life as much as she did.
Our sincere gratitude,
Tania Franco Klein, Diego Franco Klein, Kevin Klein, Karel Klein - grandchildren
Martin Klein, Ivonne Klein - son and daughter
EL MONTO FINAL ESTA EN DOLARES, Y TAMBIEN LAS DONACIONES
ESPAÑOL:
Durante las primeras horas del día de las madres (10 de mayo 2020) y un día antes de cumplir 84 años, mi adorada abuela”La Omi”, como le decimos , sufrió de un terrible derrame cerebral que la dejó batallando entre la vida y la muerte. Al percatarse de que no salía de su cuarto en la mañana, mi mamá entró para encontrarla en el piso sin conocimiento. Con urgencia le pidió a mi papá que se comunicara con el 911 para pedir una ambulancia, pero no contestaron en la línea. Para su suerte el servicio Hatzalah le envió una ambulancia que rápidamente vino al rescate.
Apresurándola al hospital más cercano, que no fuera COVID. Su vida ahora estaba en manos de un neurocirujano/ángel que le hizo una cirugía en el cerebro y quien le removió un pedazo de cráneo debido a la severidad del sangrado interno en su cabeza, (específicamente el área superior izquierda de su cerebro). La cirugía duró un poco más de 3 horas, aunque se sintió como una eternidad. Cuando salió del quirófano y fue trasladada a terapia intensiva su vida todavía estaba en peligro, su cuerpo estaba conectado a máquinas y a un respirador. Después de unos días de estar completamente sedada, los médicos bajaron la dosis para darle la oportunidad de despertar. Han pasado 6 días y su recuperación ha progresado lentamente, todavía está en terapia intensiva, y aunque, se ha estado moviendo (principalmente su lado izquierdo) y ha reconocido nuestra presencia a través de movimientos suaves, todavía está conectada al respirador porque no ha podido despertarse.
Mi abuela, Mónica, es una mujer única. Madre de 2, abuela de 4 y amiga de cientos, su amor por la vida es más grande que cualquier otra cosa. A veces tímida y audaz su presencia es como un sol que hace que todos se enamoren de su luz. La verdad es que esta mujer ha sido mi mejor amiga, mi musa, mi confidente y mi compañera de viaje y vida en los últimos años. Y sé que no soy la única que se siente así ya que es el caso de toda la familia.
Le caracteriza una infinita curiosidad por aprender. Incluso cuando perdió su hogar durante el terremoto en México en 2017 y se convirtió en damnificada, su espíritu amoroso fue más fuerte que la dura realidad en la que se encontraba. En lugar de darse por vencida, se mudó a la casa de su hija (mi madre) y comenzó a ir a clases de crítica de cine con ella, se inscribió en la universidad para personas mayores y, entre otras clases, comenzó a escribir sus memorias. Incluso posó para mí (que soy fotógrafa) y se convirtió en una de las hermosas modelos mayores que protagonizaron la portada de Vogue México para Mayo-Junio.
Omi siempre ha sido una apasionada del arte, la cultura y la historia. Incluso dedicó su carrera a dar tours a grupos alemanes en todo México para compartir su amor con el país que adoptó como suyo, hasta que se retiró hace 5 meses.
Una cosa que puedo decir con certeza es que ha pasado por algunos de los mejores años de su vida, su edad de oro. Solo por mencionar algunas cosas; road-trips en parques nacionales en Estados Unidos,visitar Israel (su sueño) y flotar en el mar muerto (incluso compró un traje de baño para eso), ir a Hollywood, bailar en videos, ser la estrella de una portada, ver películas con su hija todos los días, chismear durante al menos una hora todos los días con su hijo y también otras 5 horas con sus amigas, ir a exposiciones, a obras de teatro (fue más de 10 veces a ver a su nieto en el escenario), conciertos, cenas, amigos.
Cualquier persona que conozca a mi abuela sabría que es el tipo de persona independiente y organizada que nunca viviría sin tener un seguro médico. Pero hace unos años se las arregló para unirse al sistema de uno de los mejores hospitales públicos del país; Nutrición (créeme cuando te digo que pertenecer a su sistema es como ganarse la lotería) y debido a que se sintió protegida bajo el brazo de esta increíble institución, dejó de pagar su seguro, confiando en que podría asistir allí en caso de emergencia. Poco contaba con que comenzaría la pandemia de COVID19, y la magnífica institución que la protegería en tiempos de crisis de repente se convertiría en un HOSPITAL EXCLUSIVAMENTE COVID y la cual no asistiría ningún otro tipo de crisis.
Lo que nos lleva al día de hoy: sólo en los primeros 2 días de estar internada en el hospital privado, la factura médica ya era de $575,000 . Pesos mexicanos. Todos los días en terapia intensiva cuestan al rededor de $50,000 pesos mexicanos, al menos hasta que logremos sacarla del respirador. Desafortunadamente, nuestra familia no tiene los medios para continuar haciendo este esfuerzo importante y sabemos que todavía estamos en las etapas iniciales de esta situación, pero también sabemos lo mucho que está luchando ella por su vida.
Y es por eso que realmente necesitamos tu ayuda. Cualquier contribución, grande o pequeña, significará mucho para nosotros y con ello podremos cubrir los gastos de la cirugía, dos semanas en terapia intensiva y quizá un poco de rehabilitación. Sabemos que este es un momento muy duro para todos, pero incluso si puedes compartir nuestra historia con tus amigos, lo apreciaríamos profundamente.
Por favor ayúdanos a darle a Omi una segunda oportunidad de seguir disfrutando la vida.
**Disclosure: The image of this campaign was inspired in Barbara Kruger artwork. We hope she can understand.
Co-organizers (4)
Tania Franco Klein
Organizer
Chicago, IL
Martin Klein
Beneficiary
Tania Franco Klein
Team member
Kevin Shandor
Team member