Un nuevo riñón para Betty

Así es: sigo con Fe en Dios y en todas las personas que me puedan ayudar, para lograr los fondos necesarios que me permitirán el transplante de Riñón. Sé que la situación del Covid-19 ha complicado y trastornado al mundo entero, pero aún así, continúo batallando y pidiéndole a Dios que me siga dando fuerzas para no desanimarme. Sigo recibiendo Hemodiálisis todas las semanas y aunque es un tratamiento sumamente duro a nivel físico y mental, lo enfrento confiando en que en algún momento reúna el dinero necesario para mi transplante. Aunado a esto, lamentablemente tuve un desprendimiento de retina, por lo cual necesito una Virectomía para devolver la visión a uno de mis ojos. Gracias a todas las personas, conocidas y no conocidas, que puedan colaborar y por favor manténganme en sus oraciones según sus creencias; no pierdo la Fe en Dios Todopoderoso y que su mano milagrosa esté siempre presente, para que con la ayuda de ÉL y de todos, darle más Vida a mi Vida.

 
Te cuento mi historia

En el año 1981, a los 19 años me diagnosticaron Insuficiencia Renal Crónica, por lo cual tuvieron que realizarme un trasplante de riñón, que fue donado por una de mis queridas hermanas. Mis padres, que en ese momento, tenían que mantener a una familia numerosa (eramos 6 hermanas) no contaban con los recursos financieros para realizar tan delicada operación. En ese entonces, a través del Seguro Social, se pudo hacer la intervención en el Hospital Pérez Carreño, que para entonces era uno de los mejores centros asistenciales del país. El trasplante fue todo un éxito, tanto así, que he podido vivir 40 años con ese riñón. Pero lamentablemente ya dejó de cumplir sus funciones y hoy, a los 61 años de edad, jubilada, sin seguro médico y sin recursos económicos, estoy de nuevo en la misma situación de vulnerabilidad.

 

Mi proceso actual

En este momento estoy recibiendo Hemodiálisis para poder depurar mi sangre y seguir batallando. Es un proceso muy duro a nivel físico y mental, pero sigo con la fortaleza que Dios me da enfrentándome a este tratamiento. La profunda crisis económica, social y política de Venezuela dificulta todos los procesos asociados a mi tratamiento.

Durante este proceso además he sufrido un desprendimiento de retina que pone en riesgo mi visión y debo ser operada. 

En este enlace pueden ver todos los presupuestos y soportes que respaldan esta solicitud:
https://bit.ly/2HXRZfd


Quiero seguir viviendo

Mis ganas de vivir son inmensas y aún mayor mi Fe y confianza. Sé que con la colaboración de muchas personas bondadosas, yo puedo recaudar los fondos suficientes para mi nuevo trasplante. Soy muy afortunada de contar entre mi núcleo familiar con donadores maravillosos, personas que me aman y que están dispuestos a entregarme parte de su vida, ¡qué gran demostración de amor!


Me encomiendo todos los días a mi amado Dios, a la Virgen y al veneradísimo santo Dr. José Gregorio Hernández, para que me den fuerzas y bendiga a las personas que puedan ayudarme.

Para mí toda colaboración es grandiosa y si no tienes dinero, igual estaré súper agradecida si me ayudas a difundir este mensaje a quienes piensen que pueden colaborar.

 
Tú puedes darme Vida y ten por seguro, que la Vida te devolverá el favor con creces. Gracias y te deseo salud, salud y más salud; el tesoro más grande que se puede tener.



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My Story


“Now faith is the substance of things hoped for, the evidence of things not seen”.
Hebrews 11:1

And I am believing in that faith, faith that moves mountains in the name of the Highest God, and in the goodness and mercy of all who can help financially to bring me victoriously to the other side, on this great task ahead of my future health. 

In 1981, just 19 years old I was diagnosed with Chronic Kidney disease and in need of a transplant. My sister was able to be the donor. Those were hard times, big family (6 siblings) only my dad was working, mom stayed home and took care of us. Working with our social security system in Venezuela I was able to have the procedure done at the Hospital Perez Carreno, one of the best hospitals in the country at that time. The operation was successful, and I have lived a wonderful life for over 40 years after that. Sadly, today, at my age of 61 years, retired, without any health insurance and without any meaningful income, I find myself in the same place I was in 1981, hard times, and very vulnerable.

Today I’m receiving dialysis to battle this disease and fight for my life. It is a hard process both mentally and physically. However, I continue trusting God for the strength to keep moving forward. The social, economic, and political crisis in Venezuela has made it extremely difficult to receive the treatment required as I lose the function of my kidney

In the meantime, I also suffered a retinal detachment and I need to have surgery to avoid losing my vision.

In this link, you can check the documents that support our solicitude: https://bit.ly/2HXRZfd


I want to keep living. My desire to live is great and even greater my faith and trust in my God. I know that with the help of many wonderful people I can collect the funds needed for a new kidney transplant. I am very fortunate to count on a family that loves me and is willing to give me part of their lives. What a great gesture of love!

I continually pray to my God, my Virgen, and to our saint Dr. Jose Gregorio Hernandez to give me strength and to bless abundantly everyone that can help me. Any little or big donation can help, and if you don’t have the finances to do so, please help by spreading this message to all you know. You can help me get my life back and I assure you, life will pay you back tenfold.

Thank you so very much and I wish you health, health, and more health, the biggest treasure one can have. May the Lord bless you!